Cuaderno de bitácora XIII: Censura
Miserables que ven colores en la piel, al tiempo que se los roban al arco iris si van impresos en una bandera. Se llaman cristianos, católicos, pregoneros de un mundo como dios manda por el que jamás preguntarían a un Dios que no les daría la razón.
Está de moda la censura. No suele haber modas que perduren, pasajeras todas ellas. Ésta, como diría Milena Busquets, también pasará. Lo que, sin duda, han olvidado estos sucedáneos del franquismo, es que al final de toda la censura que mantuvo el régimen anterior, los que quedaron señalados para siempre fueron precisamente ellos, los censores. Cuando esto termine, nuestros dedos no se cansarán de apuntarles.
Por desgracia la inteligencia es un bien escaso, y la humanidad da fe de todo lo que ha supuesto la represión del género humano, la libertad es la clave de nuestra identidad como personas.
ResponderEliminarLa libertad de expresión es un derecho que tenemos todos y el peor enemigo de los depravados opresores e incultos que se esconden detrás de lo que les venga bien para oprimir y atemorizar a la gente
ResponderEliminarLa mentira, la manipulación están a la orden del día en los medios de comunicación con un ensañamiento muy parecido a los de entonces, franquista -fascista. Lo más preocupante son sus suguidores.
ResponderEliminarSiempre muy acertado, te felicito, Pan.
Gracias, Bell. Eres un sol.
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